En la
mitología griega,
Balio (en
griego Βαλιος) era un
caballo inmortal hijo del dios-viento
Céfiro y la
harpía Podarge.
Balio y su hermano
Janto fueron el regalo que entregó
Poseidón a
Peleo y
Tetis en su famosa boda. Posteriormente pasarían al hijo de ambos, el célebre
Aquiles, causando gran admiración durante la
guerra de Troya por sus cualidades mágicas.
Tuvo la deshonra de ser uno de los caballos a los que Aquiles ató el cuerpo de
Héctor, humillando así a uno de los más grandes héroes de la historia mítica.